Libros 2010 Una Odisea en el Tiempo, o, ¿a qué huelen los libros?

Iniciado por El_Desaprensivo, Enero 02, 2010, 07:51:37 PM

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Tejemaneje

Yo diferencio entre las obras de evasión, que son una puta mierda, y las que tienen intenciones profundas, que son una puta mierda con í­nfulas. Las que quedan son las buenas, las que a mí­ me gustan.

Ariete

Entre las obras de evasión yo destacarí­a muy en especial y por encima del resto el túnel que hizo con sólo una cucharilla el preso de Top secret.

Cocó


Mozart

Cita de: laura_m en Febrero 01, 2010, 06:07:41 PM
Cita de: Cas en Febrero 01, 2010, 06:03:57 PM
Cita de: laura_m en Febrero 01, 2010, 06:00:34 PM
Cita de: Cas en Febrero 01, 2010, 05:59:21 PM
que no, que me parece muy bien evadirse, que voy a decir que soy areopagita senior.

Pues en esa identificación que veo que hacéis entre "evasión" y "cosa un poco chorras y superficial" yo sí­ veo cierto poso de judeo-cristianismo, la verdad.
joder, laura donde puñetas hago yo esa identificación, que no.



Me ha parecido detectarlo en Lace y en Ariete, que Ariete me poní­a como ejemplo de cine "no evasivo" Alguien voló sobre el nido del cuco, en contraposición a... ¿Avatar, por ejemplo??


¿Pero eso de literatura de evasión no se refiere a lo que antes se conocí­a como prosa idealista?  la que retoma la tradición de las novelas de caballerí­as, moriscas, bizantinas o pastoriles de mundos ideales y exóticos, y aventuras y héroes fantásticos, perfectos...  (Luego vino el barroco con sus ironí­as y sarcasmos y la puta realidad a complicarlo todo)

Cocó

Yo pensaba que evadirse tení­a mucho que ver con evacuar, y no sólo en la raiz

Cocó


Ejem, me voy a mi sofá de pensar a seguir con El Pintor de Batallas. Por ahora está siendo un poquito soso y pretenciosamente profundo, a ver si empiezan ya los tiros, las masacres y los misterios varios. La chica, vaya.

JM

In God we trust (sometimes, some pictures: http://www.areopago.eu/index.php?topic=888.msg574445#msg574445 )... (C) Extineo

Szalai



Cortesí­a de Bic en el evento del Club del libro. Poco se puede contar, porque es un libro que a nada que largues lo destripas. El hecho de que lo haya publicado Anagrama en la colección Panorama de Narrativas descoloca un poco. Entretiene. Me hubiera gustado que el autor hubiese sido más valiente y se hubiera zambullido en el género a por todas. Totalmente desaconsejado buscar información en google porque el spoiler está asegurado.

Szalai



“Juro por Dios que éste es probablemente el mejor libro que he leí­do en cinco años. Probablemente. O quizás incluso en diez”, asegura Palahniuk en la contraportada. Buehh … Está bien. Al que le guste Palahniuk probablemente le encante. Como en las novelas de Palahniuk es disfuncional y al mismo tiempo tiene habilidades poco comunes que articulan la trama, en este caso el superpoder de crear identidades falsas falsificando documentos. Está narrado en primera persona alternando pasado y presente, dando y ocultando información hasta que llega el momento en que quedan todas las cartas sobre la mesa. Arranca muy bien. El cierre queda un tanto deslucido, pero en conjunto mola. Punk Thriller dice la contraportada. Más thriller que punk

Szalai



Gordon Lish es conocido en España por ser el editor (en más de un sentido) de los relatos de Raymond Carver. A Carver desde siempre le he tenido un poco de maní­a y soy incapaz de ver los méritos que le atribuyen. El tema Carver está muy polarizado y me imagino que en algún hilo de estos de dios se habrá derramado abundante sangre. El caso es que un poco a lo bobo lo he pillado en la biblioteca y ahora también le tengo maní­a a Lish. Es un libro de estos que alargan un par de anécdotas y en los que la estructura es, de largo, más importante que la trama. Aburrido, con un punto irritante. Bajo vuestra responsabilidad.

antibalas

Cita de: Redneck en Febrero 01, 2010, 08:33:06 PM
Cita de: antibalas en Febrero 01, 2010, 05:27:58 PM
No sé lo que pretenderá MH, pero desde fuera no veo excluyentes ambas sendas lecturas. El tí­o es divertido y con sentido del humor y con guarreridas. Y sus apuntes filosóficos o como quieras llamarlos me parecen muy bien traí­dos. O sea, que te la puedes remangar con el ceño fruncido, y encima echar unas risas. Ní£o é pouca merda, que dicen los japoneses.

Podemos resumir que Huelebién instruye deleitando, y amargando si en las manos que cae son las del pobre desgraciao tipo y/o individuo con más de mil mensajes en un foro de internéc.

Bien, siguiendo una larga tradición, te equivocas. Al contrario que Derrida, Guattari, Lyotardos y demás gabachos mascachapas oscurantistas, MH es un positivista con fe en la ciencia que siempre deja abierto un resquicio de esperanza al futuro tecnológico. Así­ que de amargándonos, nada. Todo lo contrario: esperanzándonos!! Interpreto que está al caer la cibermuñeca hinchable con temperatura humana y humectación a pilas que te susurra al oí­do qué grande la tienes, Luisma: ese es para mí­ el mensaje consolador de Huoueweí¼allandrés. Evádete si quieres, y si cabes por la ventana, pero el futuro pinta de cojones.

Ariete

#551
Antes de que se siga hablando de libros, el concepto este "de evasión" ya ha sido descrito anteriormente por otros contertulios y más o menos creo que todos entendemos qué significa, sin más explicaciones y sin que eso signifique que nos guste o disguste la evasión, la diversión o el judeocristianismo. A mí­ concretamente me gusta ver y leer las mejores series, pelis y novelas del mundo, porque si las que viera no fueran las mejores entonces no verí­a esas, verí­a otras.

Yo lo que querí­a señalar es que esa etiqueta no es la adecuada para hablar de Houellebeq porque aunque se la adhiera con la mejor intención se corre el peligro de considerar que entre col y col lechuga y agarro y leo a Houellebeq como entremés entre dos obras de profundidad. Pero no es así­. NADA ES MíS PROFUNDO ni van tan al meollo filosófico como sus novelas.

Durante las décadas previas mucha gente ha considerado erróneamente que lo realmente profundo era, por ejemplo, la divagación teológica. Todo eso de los hermanos Karamazov, Kierkegard, el existencialismo... O Franí§ois Miterrand poniéndose pomposo diciendo que era agnóstico pero que toda su vida ha buscado a Dios desesperadamente. Vamos hombre, no te lleves tan mal rato por esa chorrada, preguntarse por un posible orden cósmico superior, si el Universo se expande o que si tiene un borde entonces qué hay al otro lado, son cosas que dan qué pensar, vale. Pero durante un rato y sin que importe mucho la respuesta. Que nadie en su sano juicio deberí­a agobiarse por esas cosas.

Pero Houellebeq en su obra nos hace plantearnos en cambio las preguntas que verdaderamente importan, las que realmente agobian, las que todo ser humano se hace desde el principio de los tiempos y que no hay telescopio ni dios que responda: cuando, cómo y con quién podré follar. Los humanos no somos más que estructuras de carbono diseñadas por la selección natural que anhelan dos cosas al igual que todo bicho viviente, la supervivencia y la reproducción. Y este francés lo que hace es mostrar esa esencia humana sin chorradas que distraigan por en medio, va al grano. El deseo que quema por dentro de meterla, la ansiedad ante lo incierto de lograrlo, la frustración cuando no se consigue y la tristeza post-coitum cuando sí­ se consigue.

Me parece a mí­, vamos.

Dionisio Aerofagita

Cita de: laura_m en Febrero 01, 2010, 05:58:01 PM
Pero es que ambas cosas son compatibles. Primero te evades, y luego, a menos que tengas por cerebro un cacho de corcho, se suele reflexionar un poco en plan "ayvá, a ver si lo de Desolation Williams va a ser parecido a lo que le pasa a la gente con...".

Yo ya lo comenté por aquí­ hace tiempo, que me convencen quienes dicen que en la literatura se integran básicamente dos aspectos.

Uno, vivir la historia. Es decir, meterse en el mundo, en la historia, en lo que sucede, en los personajes (ojo, no necesariamente "identificarse con el protagonista" que puede ser muy cerrado), vivir otras vidas, etc. Esto es lo que proporciona evasión.

Dos, ir más allá de la "literalidad" de la historia, interpretarla, trascenderla percibiéndola como un sí­mbolo. Aquí­ hay una actividad digamos cerebral (descubrir que la historia es un código que apunta a otra cosa), pero no sólo cerebral, dado que afecta a las emociones y a la empatí­a. En el lado más simplón, es una moraleja evidente, pero no tiene por qué ser así­, dado que los verdaderos sí­mbolos son siempre abiertos hacia una multiplicidad de significados. Esto no proporciona evasión, sino comprensión de la realidad, del mundo y de la propia vida.

Hay libros que están pensados sólo para Uno. Pongamos, una novela policiaca tí­pica. Nos puede entretener y evadir y todo eso, pero no amplifica nuestra experiencia. Bueno, no todo tiene por qué amplificar nuestra experiencia, todo esto está muy bien, pero no es Harte. Hay libros que están pensados sólo para Dos, pero entonces no serí­an propiamente literatura, sino ensayo, o todo lo más alegorí­as o fábulas donde lo que importa es el mensaje, no la historia.

La mayorí­a de los libros están en un punto entre Uno y Dos, no necesariamente equilibrado. Por ejemplo, los Pilares de la Tierra es una obra muy muy entretenida, pero que aporta poco o nada desde la perspectiva de Dos. Bueno, pero uno se lo pasa bien. En cambio, Paulo Coelho pretenderí­a ir a Dos (aunque yo creo que mal) demasiado radicalmente porque la historia es una excusa para soltar su rollito. También hay lectores que tiran más para un lado que para el otro (y por eso tienen lecturas muy diferentes), o el mismo lector puede hacer distintas lecturas dependiendo de muchos factores.

Pero lo que es puramente la experiencia estética o artí­stica consiste en la integración "perfecta" de estas dos dimensiones como realidades no disociadas ni separadas. Uno no está viviendo el relato en sí­ mismo, como pura evasión, sino que viviendo la historia y evadiéndose, termina comprendiéndose mejor (y comprendiendo el poder, la amistad, el amor, los celos, la injusticia, el sufrimiento...) Pero tampoco está anotando el mensajito oculto de cada texto, disociándolo de la historia, porque el aprendizaje no se produce en un mundo cerebral de principios abstractos que está fuera de la historia, sino viviendo la historia misma (y a menudo, cuando tratas de explicar lo que has aprendido, la cagas, porque la moraleja nunca es mejor que el cuento).
Que no sean muchas tus palabras, porque los sueños vienen de la multitud de ocupaciones y las palabras necias, de hablar demasiado.

laura_m

Cita de: Dionisio Aerofagita en Febrero 02, 2010, 08:42:33 AM
Cita de: laura_m en Febrero 01, 2010, 05:58:01 PM
Pero es que ambas cosas son compatibles. Primero te evades, y luego, a menos que tengas por cerebro un cacho de corcho, se suele reflexionar un poco en plan "ayvá, a ver si lo de Desolation Williams va a ser parecido a lo que le pasa a la gente con...".

Yo ya lo comenté por aquí­ hace tiempo, que me convencen quienes dicen que en la literatura se integran básicamente dos aspectos.

Uno, vivir la historia. Es decir, meterse en el mundo, en la historia, en lo que sucede, en los personajes (ojo, no necesariamente "identificarse con el protagonista" que puede ser muy cerrado), vivir otras vidas, etc. Esto es lo que proporciona evasión.

Dos, ir más allá de la "literalidad" de la historia, interpretarla, trascenderla percibiéndola como un sí­mbolo. Aquí­ hay una actividad digamos cerebral (descubrir que la historia es un código que apunta a otra cosa), pero no sólo cerebral, dado que afecta a las emociones y a la empatí­a. En el lado más simplón, es una moraleja evidente, pero no tiene por qué ser así­, dado que los verdaderos sí­mbolos son siempre abiertos hacia una multiplicidad de significados. Esto no proporciona evasión, sino comprensión de la realidad, del mundo y de la propia vida.

Hay libros que están pensados sólo para Uno. Pongamos, una novela policiaca tí­pica. Nos puede entretener y evadir y todo eso, pero no amplifica nuestra experiencia. Bueno, no todo tiene por qué amplificar nuestra experiencia, todo esto está muy bien, pero no es Harte. Hay libros que están pensados sólo para Dos, pero entonces no serí­an propiamente literatura, sino ensayo, o todo lo más alegorí­as o fábulas donde lo que importa es el mensaje, no la historia.

La mayorí­a de los libros están en un punto entre Uno y Dos, no necesariamente equilibrado. Por ejemplo, los Pilares de la Tierra es una obra muy muy entretenida, pero que aporta poco o nada desde la perspectiva de Dos. Bueno, pero uno se lo pasa bien. En cambio, Paulo Coelho pretenderí­a ir a Dos (aunque yo creo que mal) demasiado radicalmente porque la historia es una excusa para soltar su rollito. También hay lectores que tiran más para un lado que para el otro (y por eso tienen lecturas muy diferentes), o el mismo lector puede hacer distintas lecturas dependiendo de muchos factores.

Pero lo que es puramente la experiencia estética o artí­stica consiste en la integración "perfecta" de estas dos dimensiones como realidades no disociadas ni separadas. Uno no está viviendo el relato en sí­ mismo, como pura evasión, sino que viviendo la historia y evadiéndose, termina comprendiéndose mejor (y comprendiendo el poder, la amistad, el amor, los celos, la injusticia, el sufrimiento...) Pero tampoco está anotando el mensajito oculto de cada texto, disociándolo de la historia, porque el aprendizaje no se produce en un mundo cerebral de principios abstractos que está fuera de la historia, sino viviendo la historia misma (y a menudo, cuando tratas de explicar lo que has aprendido, la cagas, porque la moraleja nunca es mejor que el cuento).

En resumen: que estás de acuerdo con lo que decí­a.

laura_m

Cita de: Ariete en Febrero 02, 2010, 01:01:11 AM
Antes de que se siga hablando de libros, el concepto este "de evasión" ya ha sido descrito anteriormente por otros contertulios y más o menos creo que todos entendemos qué significa, sin más explicaciones y sin que eso signifique que nos guste o disguste la evasión, la diversión o el judeocristianismo. A mí­ concretamente me gusta ver y leer las mejores series, pelis y novelas del mundo, porque si las que viera no fueran las mejores entonces no verí­a esas, verí­a otras.

Yo lo que querí­a señalar es que esa etiqueta no es la adecuada para hablar de Houellebeq porque aunque se la adhiera con la mejor intención se corre el peligro de considerar que entre col y col lechuga y agarro y leo a Houellebeq como entremés entre dos obras de profundidad. Pero no es así­. NADA ES MíS PROFUNDO ni van tan al meollo filosófico como sus novelas.

Durante las décadas previas mucha gente ha considerado erróneamente que lo realmente profundo era, por ejemplo, la divagación teológica. Todo eso de los hermanos Karamazov, Kierkegard, el existencialismo... O Franí§ois Miterrand poniéndose pomposo diciendo que era agnóstico pero que toda su vida ha buscado a Dios desesperadamente. Vamos hombre, no te lleves tan mal rato por esa chorrada, preguntarse por un posible orden cósmico superior, si el Universo se expande o que si tiene un borde entonces qué hay al otro lado, son cosas que dan qué pensar, vale. Pero durante un rato y sin que importe mucho la respuesta. Que nadie en su sano juicio deberí­a agobiarse por esas cosas.

Pero Houellebeq en su obra nos hace plantearnos en cambio las preguntas que verdaderamente importan, las que realmente agobian, las que todo ser humano se hace desde el principio de los tiempos y que no hay telescopio ni dios que responda: cuando, cómo y con quién podré follar. Los humanos no somos más que estructuras de carbono diseñadas por la selección natural que anhelan dos cosas al igual que todo bicho viviente, la supervivencia y la reproducción. Y este francés lo que hace es mostrar esa esencia humana sin chorradas que distraigan por en medio, va al grano. El deseo que quema por dentro de meterla, la ansiedad ante lo incierto de lograrlo, la frustración cuando no se consigue y la tristeza post-coitum cuando sí­ se consigue.

Me parece a mí­, vamos.


Pero Houellebecq habla de más cosas, Ari. Por ejemplo, habla de que es de mal gusto procrear o ser viejo. O de que la vida serí­a mucho mejor sin intestinos. O de lo guay que es internet, ya que te evita la necesidad de conocer "en persona" a otros humanos. A mí­ estos temas me interesan bastante más que lo de meterla, la verdad.