50 libros al año - Una propuesta

Iniciado por Imparsifal 2.0, Enero 09, 2007, 01:29:00 PM

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groucho

joder Simpar Impar
en la mano lo tuve el otro dí­a
que tal está?
"no ha sido mala la jugada"

Cocó

Cita de: Simpar_elMarino en Julio 13, 2007, 02:11:38 PMVenga, que alguien abra un hilo ya con fotos pero que se lean los tí­tulos.


¿Se lee bien?


Cita de: Cocó en Julio 11, 2007, 08:31:43 AM


Kamasutra


Of the Auparishtaka or mouth congress



There are two kinds of eunuchs, those that are disguised as males, and those that are disguised as females. Eunuchs disguised as females imitate their dress, speech, gestures, tenderness, timidity, simplicity, softness and bashfulness. The acts that are done on the jaghana or middle parts of women, are done in the mouths of these eunuchs, and this is called Auparishtaka. 1 These eunuchs derive their imaginable pleasure, and their livelihood from this kind of congress, and they lead the life of courtesans. So much concerning eunuchs disguised as females.


Eunuchs disguised as males keep their desires secret, and when they wish to do anything they lead the life of shampooers. Under the pretence of shampooing, a eunuch of this kind embraces and draws towards himself the thighs of the man whom he is shampooing, and after this he touches the joints of his thighs and his jaghana, or central portions of his body. Then, if he finds the lingam of the man erect, he presses it with his hands and chaffs him for getting into that state. If after this, and after knowing his intention, the man does not tell the eunuch to proceed, then the latter does it of his own accord and begins the congress. If however he is ordered by the man to do it, then he disputes with him, and only consents at last with difficulty.







Un detallito que regalaré a mi lover




Rednuts

Cita de: Simpar_elMarino en Julio 13, 2007, 02:18:17 PM




Cita de: groucho en Julio 13, 2007, 02:25:38 PM
joder Simpar Impar
en la mano lo tuve el otro dí­a
que tal está?

Depende a qué mano te refieras, es posible que como esté sea duro.

Tú no tienes convicciones porque tú eres de Málaga

Bic

Los libros son finitos, los encuentros sexuales son finitos, pero el deseo de leer y de follar es infinito, sobrepasa nuestra propia muerte, nuestros miedos, nuestras esperanzas de paz.

Bic

Ayer noche terminé el libro 50: "Amuleto", de mi avatar Roberto Bolaño... Comprado en una pausa de la obra de teatro de "2666".



Esta novela corta de Bolaño, de apenas 150 páginas, es una versión ampliada (y escrita con un estilo similar) de uno de los cuentos-historia de "Los detectives salvajes": la vida de Auxilio Lacouture, "la madre de los poetas mexicanos". Sin ser poeta ella misma, Auxilio pasó toda su vida frecuentando jóvenes poetas, "jóvenes machitos que llegaban con sus folios doblados y sus libros sobados y sus cuadernos sucios (...) y me los daban a leer, sus poemas, sus versos, sus ahogadas traducciones, y yo tomaba esos folios y los leí­a en silencio, de espaldas a la mesa en donde todos brindaban y trataban angustiosamente de ser ingeniosos o irónicos o cí­nicos, pobres ángeles mí­os, y me sumergí­a en esas palabras (me gustarí­a decir flujo verbal, pero faltarí­a a la verdad, allí­ no habí­a flujo verbal sino balbuceos) hasta la médula, me quedaba por un instante sola con esas palabras entorpecidas por el brillo y la tristeza de la juventud".

En septiembre de 1968, el presidente de México Dí­az Ordaz mandó a la policí­a a suprimir la autonomí­a universitaria en la UNAM, deteniendo a miles de estudiantes, matando a un par de cientos y vaciando la universidad durante semanas. Auxilio Lacouture, huyendo de la policí­a, permanece esas semanas encerrada en el lavabo de mujeres, sin nada que comer y volviéndose medio loca de miedo y soledad. Esos dí­as en el lavabo se convierten en el punto focal de la vida de Auxilio, en el más importante, y en una jugada narrativa de puta madre, Bolaño lo convierte en el centro de la narración: desde ese lavabo la narradora recuerda su pasado y también su futuro, lo que está por venir. Aunque viva muchos más años en México después de aquello., en cierta forma ella siempre, toda su vida, permanece encerrada en ese lavabo, que se filtra en todas y cada una de sus experiencias.

Desde ese lavabo de 1968, Auxilio recuerda historias que le ocurrieron en 1967, en 1973, en 1978, otras incluso que no ocurrieron nunca y alguna que ocurrirá en un futuro lejano. A medida que avanzan las páginas aumenta la irrealidad de sus recuerdos, empiezan las alucinaciones, convirtiendo el final en una alegorí­a bastante chula del frí­o de la soledad y de una generación latinoamericana de jóvenes muertos y desaparecidos.

Sin ser el mejor de los libros de Bolaño, es igualmente recomendable para quien quiera ver algo de su estilo sin tener que meterse entre pecho y espalda tochacos como "2666" o "Los detectives salvajes".

P & L

P.S: Hablando de "2666": en "Amuleto" es el único momento de la narrativa de Bolaño donde aparece explí­citamente esta cifra. Concretamente en este párrafo:

"La avenida Guerrero del DF, a esa hora, se parece sobre todas las cosas a un cementerio, pero no a un cementerio de 1974, ni a un cementerio de 1968, ni a un cementerio de 1975, sino a un cementerio del año 2666, un cementerio olvidado debajo de un párpado muerto o nonato, las acuosidades desapasionadas de un ojo que por querer olvidar algo ha terminado por olvidarlo todo".
Los libros son finitos, los encuentros sexuales son finitos, pero el deseo de leer y de follar es infinito, sobrepasa nuestra propia muerte, nuestros miedos, nuestras esperanzas de paz.

California


Bic, hermano, de dónde cojones sacas el tiempo?


Rednuts

Hay un libro de poemas de Roger Wolfe titulado Dí­as perdidos en los transportes públicos. Apuesto que Bic es de ahí­ de donde saca el tiempo.
Tú no tienes convicciones porque tú eres de Málaga

Bic

Cita de: California en Julio 14, 2007, 12:27:41 PM
Bic, hermano, de dónde cojones sacas el tiempo?

Pues no lo sé, la verdad, pero siempre me falta. Últimamente tengo más tiempo para leer porque hace semanas que no actúo en ningún espectáculo de cuentacuentos, ni voy a ensayos de teatro: las dos cosas que más tiempo me quitaban. En Octubre quiero volver a apuntarme a algún grupo, así­ que podré leer menos... Pero mientras tanto, aprovecho y lo disfruto: ya comenté en no recuerdo qué hilo que soy un puto yonqui de la letra escrita.

Otra cosa es que Redneck ha clavado lo de los transportes públicos: cada dí­a tengo, para ir y volver del curro y entre metros, trenes y caminar por la calle, unos cincuenta minutos de ida y otros tantos de vuelta, que paso en su mayor parte leyendo y/o admirando inocentemente escotes ajenos. Antes aprovechaba ese tiempo para leerme La Vanguardia, pero últimamente me he pasado a la edición digital y ahora prefiero ir con el libro de turno. Y bueno, como transporte público también cuentan los viajes que me tengo que comer por curro: cuando toca ir a Montpellier tengo un buen montón de horas en tren, y si hay que ir más lejos en avión me como un buen rato de aeropuerto. En esos momentos, o hay algún jefe pesao del curro al que darle palique o puedo dedicarme a algún tocho tranquilamente.

Un gran momento del dí­a es cuando camino hacia el curro (un paseí­llo de unos diez minutos), con un croissant de chocolate en una mano y un libro en la otra... Mis amigos me preguntan siempre si no choco contra las farolas, pero siempre les contesto que es imposible: el libro lo llevo por delante a media altura y me sirve de sónar para ir detectando obstáculos.

P & L
Los libros son finitos, los encuentros sexuales son finitos, pero el deseo de leer y de follar es infinito, sobrepasa nuestra propia muerte, nuestros miedos, nuestras esperanzas de paz.

Tejemaneje

En Diario de un Hombre Humillado, de Félix de Azúa, hay un pasaje maravillosamente escrito sobre cuándo hay que dejar de leer debido a los perjuicios que a ciertas alturas de la vida producen los libros. Para llegar a ese momento, Bic, sólo te falta una alcantarilla sin la tapadera puesta y un viaje a la cloaca llevándote por el camino a dos poceros.

Shizuka

Cita de: Tejemaneje en Julio 14, 2007, 01:15:55 PM
En Diario de un Hombre Humillado, de Félix de Azúa, hay un pasaje maravillosamente escrito sobre cuándo hay que dejar de leer debido a los perjuicios que a ciertas alturas de la vida producen los libros. Para llegar a ese momento, Bic, sólo te falta una alcantarilla sin la tapadera puesta y un viaje a la cloaca llevándote por el camino a dos poceros.

Si te gusta cómo escribe este catalino tienes entre otros "Historia de un idiota contada por él mismo", que por cierto, creí­ ver en la estanterí­a de Bic; el protagonista -idiota del siglo XX- se empeña en una afanosa y monotemática investigación de la felicidad que le conduce inexorablemente a la ruina. Al que prefiera los libros de ensayos, recomendarles de este mismo autor "Baudelaire y el artista de la vida moderna" y "Lecturas compulsivas".

S.

[¿Alguien sabrí­a contarme algo sobre Dacia Maraini y su "Bagheria"?]

California

Citarque paso en su mayor parte leyendo y/o admirando inocentemente escotes ajenos

y qué se lee en los escotes ajenos, Bic?

el de la 13

Dacia Maraini es una Rosa Montero con í­nfulas.
Y lo digo con la autoridad que me da no haber leí­do jamás un libro de ninguna de las dos.
Sus voy a hacer una pubricidad mala.

Tejemaneje

Cita de: Shizuka en Julio 14, 2007, 06:51:59 PM
Cita de: Tejemaneje en Julio 14, 2007, 01:15:55 PM
En Diario de un Hombre Humillado, de Félix de Azúa, hay un pasaje maravillosamente escrito sobre cuándo hay que dejar de leer debido a los perjuicios que a ciertas alturas de la vida producen los libros. Para llegar a ese momento, Bic, sólo te falta una alcantarilla sin la tapadera puesta y un viaje a la cloaca llevándote por el camino a dos poceros.

Si te gusta cómo escribe este catalino tienes entre otros "Historia de un idiota contada por él mismo", que por cierto, creí­ ver en la estanterí­a de Bic; el protagonista -idiota del siglo XX- se empeña en una afanosa y monotemática investigación de la felicidad que le conduce inexorablemente a la ruina. Al que prefiera los libros de ensayos, recomendarles de este mismo autor "Baudelaire y el artista de la vida moderna" y "Lecturas compulsivas".

S.

[¿Alguien sabrí­a contarme algo sobre Dacia Maraini y su "Bagheria"?]

De Azúa he leí­do también ese, Historia de un Iditota..., que no estaba mal, aunque como novela es mejor la del hombre humillado. Como ensayo recomiendo Diccionario de las Artes, una auténtica maravilla. En sus novelas, Azúa tiene pasajes muy brillantes, de genio o casi de genio, pero se desinfla mucho entre ellos, siempre manteniendo un nivel. En Diccionario de las Artes sí­ mantiene una regularidad asombrosa en su nivel más alto, además, aunque es un ensayo, está contado de forma muy novelada, muy literaria, incluso con momentos de poesí­a, poesí­a de la buena quiero decir (para que no se espante nadie pensando en cursiladas).

Shizuka

Cita de: el de la 13 en Julio 14, 2007, 07:07:11 PM
Dacia Maraini es una Rosa Montero con í­nfulas.
Y lo digo con la autoridad que me da no haber leí­do jamás un libro de ninguna de las dos.

Perfecto, tredici; ahora no es una duda, sino una encrucijada. Teniendo en cuenta cómo hablaste de la "Seta" de Baricco -sin haberlo leí­do tampoco-, o desisto, o compro todo lo que encuentre de Maraini.

S.

[Su currí­culum es, a primera vista, impresionante]

el de la 13

No sé, yo creo que si te parecí­a exquisito ese fragmento que colgaste te va a gustar un montón. Es de esas que habla de si misma en tercera persona. Yo leí­ las primeras páginas de un libro suyo bastante delirante en el que ella era también un personaje, se escondí­a bajo los nombres de La Mujer del Pelo Blanco o la Autora, e invitaba a los personajes a mermelada casera. Todo escrito en condicional, para acabarlo de rematar.

Pensándolo mejor, te va a encantar.

(Por cierto, que habrí­a que ver la relación entre lo impresionante de su currí­culum y el hecho de que estuviera casada con Alberto Moravia.)
Sus voy a hacer una pubricidad mala.