Hilo tragico de la decadencia italiana

Iniciado por el de la 13, Febrero 01, 2007, 12:05:23 PM

Tema anterior - Siguiente tema

el de la 13

Berlusconi pide perdón
El ex primer ministro italiano se disculpa públicamente ante su esposa por flirtear con otras mujeres en una gala televisiva



El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi se ha disculpado públicamente ante su esposa por su comportamiento sexista. Berlusconi ha escrito una carta a los medios de comunicación en la que pide a su mujer que le perdone porque su actitud en una gala televisiva en la que flirteó con otras mujeres fueron "ocurrencias dichas sin pensar, palabras galantes y frivolidades de un momento".
"Hemos pasado juntos toda una vida, hemos tenido tres hijos a quienes hemos criado con mucho amor y cariño gracias a la gran persona que tu eres", ha escrito el jefe de la oposición italiana. Berlusconi ha añadido que el estrés de su actividad "abre espacio a las pequeñas irresponsabilidades de un carácter juguetón, autoirónico y a veces irreverente".

Su esposa, Verónica Berlusconi, se habí­a saltado su tradicional discreción y habí­a escrito una carta al director del diario italiano La Repubblica para exigir públicamente a su esposo que le pidiera disculpas por unas afirmaciones “inaceptables” que realizó hace unos dí­as en una gala en la que piropeó a un par de estrellas catódicas. A una le dijo que con ella “irí­a a donde fuera” y a otra, que “si no estuviera casado, me casarí­a con usted de inmediato”.

Verónica comienza recordando que en 27 años de matrimonio con Berlusconi, siempre ha mantenido la “reserva” y un papel “circunscrito a la dimensión privada” para “aportar serenidad y equilibrio a la familia”. Pero esta vez, dado lo singular del caso, “vence con dificultad” esa reserva, para “expresar mi reacción a las afirmaciones de mi marido en el curso de la cena de gala tras la entrega de los Telegatti, donde, dirigiéndose a algunas de las mujeres presentes, mi marido ha soltado afirmaciones para mí­ inaceptables”.

Estas “afirmaciones”, debidas a la pasión que Il cavaliere siente por las mujeres, fueron dos. A Aida Yespica, modelo y estrella televisiva a la que se ha podido ver en España en el programa La selva de los famosos, le dijo que irí­a con ella “a donde fuera”, después de que ella le dijera “Presidente, irí­a con usted a una isla desierta”. No quedó ahí­ la cosa. En el transcurso de la cena, tuvo ocasión de soltar otra de sus perlas. A Melissa Satta, que llevaba un vestido que dejaba poco a la imaginación, le espetó: “Veo que su sastre ha escatimado la tela”. Finalmente, rodeado de Micaela Biancofiore y Mara Carfagna, dice con respecto a esta última: “Miradla, si no estuviera casado, me casarí­a con ella de inmediato”.

Esto ha sido demasiado para Verónica, que por ello ha decidido hacer público su enfado en las páginas de La Repubblica. Para la esposa de Berlusconi, con el que tiene tres hijos ?hay otros dos de un anterior matrimonio del polí­tico- son afirmaciones “lesivas para mi dignidad” y que “por la edad, el papel polí­tico y social y el contexto familiar de la persona de la que provienen, no pueden ser tomadas como simples bromas”.

“A mi marido y al hombre público le exijo públicamente disculpas, no habiéndolas recibido en privado” dice la ofendida esposa, para no sentirse “como el personaje de Catherine Dunne, la mitad de nada”.

Termina la carta Verónica exponiendo las razones familiares que le empujan a demandar las excusas de su marido de forma tan pública, máxime cuando siempre se ha mantenido en un discreto segundo plano. Dice que siempre ha intentado evitar el “conflicto conyugal”, incluso cuando el “comportamiento” de su marido ha dado razones para ese conflicto, y todo por su devoción a un “proyecto familiar estable”, que ha podido verse afectado por el crecimiento de la dimensión pública del esposo. Dice que siempre se ha cuidado al expresar sus opiniones porque podrí­an afectar a su marido y tener “influencia sobre sus hijos”.

“Pero esta lí­nea de conducta tiene un único limite, mi dignidad de mujer que debe constituir un ejemplo para los hijos”, dice. Así­, con esta carta, da a sus “hijas, ya adultas, el ejemplo de una mujer capaz de defender su propia dignidad respecto a los hombres”. Asimismo, espera que esta defensa de su dignidad “ayude a mi hijo a no olvidar el valor fundamental del respeto a la mujer, con lo que podrá establecer con ellas relaciones siempre sanas y equilibradas”.

_________________________________________________________________________________________________________

Viene hoy ademas en el Pais un articulo de Enric Gonzalez sobre el tema, que no puedo colgar porque no estoy registrado, si alguien lo cuelga, le doy las gracias.


Sus voy a hacer una pubricidad mala.

el de la 13

Cabrones, que hasta he puesto una foto de cuando le puso los cuernos a Piqué.
Sus voy a hacer una pubricidad mala.

NubeBlanca

Si no fuera él, dirí­a que todo esto es publicidad.

También que Divorcio a la italiana es una de mis pelí­culas favoritas de todos los tiempos.

Caracartón

Me imagino que la señora pensará que su marido le ha sido fiel en estos veintisiete años de matrimonio. ¡que potito!
En el país de los ciegos el tuerto ha colocado a todos sus yernos.

el de la 13

seamos sinceros: la gravedad de una infidelidad es algo directamente proporcional al grado de visibilidad social. Retransmitida por la tele en directo... pues eso.

Ademas ayer al Milan le metieron tres en el olimpico de Roma, vaya dia para el Caballero.
Sus voy a hacer una pubricidad mala.

NubeBlanca

Cita de: el de la 13 en Febrero 01, 2007, 01:11:07 PM
seamos sinceros: la gravedad de una infidelidad es algo directamente proporcional al grado de visibilidad social. Retransmitida por la tele en directo... pues eso.

Los cuernos son los Otros. Por eso es una palabra que siempre me he negado a usar. Sí­, soy un perro ideologizado.

Bambi

Los amores públicos de Berlusconi
El matrimonio airea en cartas abiertas publicadas en la prensa sus desavenencias conyugales

Silvio Berlusconi divide Italia. La mitad del paí­s le adora. La otra mitad le detesta y se alinea, de forma incondicional, con su esposa. Las dos Italias asistieron ayer, entre estupefactas y apasionadas, a una bronca conyugal pública y tremenda. Veronica Lario, la esposa de Berlusconi, exigió a su marido "disculpas públicas" en la portada de La Repubblica, el menos berlusconiano de los diarios, por haberla ofendido coqueteando con una diputada de Forza Italia. Il Cavaliere tardó unas horas, pero reaccionó. Y pidió perdón de forma pública, a través de una carta abierta. Veronica Lario, nombre artí­stico de Miriam Bartolini, es la segunda esposa de Berlusconi y, hasta donde se sabe, el único elemento discreto en la vida desmesurada del ex presidente del Gobierno. No suele acudir a actos oficiales, no suele aparecer en la prensa (aunque se conozcan sus tendencias progresistas), no le acompaña en los fines de semana sardos y no suele quejarse. Calló incluso cuando su marido, en una rueda de prensa, bromeó sobre un supuesto idilio entre la propia Veronica y Massimo Cacciari, alcalde de Venecia y filósofo de izquierdas. Por eso creó conmoción la portada que ayer sacó a la calle el diario La Repubblica, tradicionalmente hostil a Il Cavaliere. "Veronica Berlusconi: 'Mi marido me debe excusas públicas", era el primer titular.

Los antecedentes resultaban bien conocidos por el público. Berlusconi llegó a la cena de los Telegatti [premios televisivos concedidos el pasado sábado] a la una de la mañana, en un estado cercano a la euforia. A las dos, prodigaba piropos y ofertas de matrimonio. A las tres se ofreció como letrista al cantante Zucchero. A las cuatro proclamó que Gianfranco Fini serí­a su sucesor como lí­der del centro-derecha. El enésimo show de Berlusconi ocupó amplio espacio en la prensa.

No tanto como la misiva de Veronica. Pocas cartas al director merecen tanto alarde tipográfico. En este caso, justificado. "Con dificultad supero la reserva que ha caracterizado mi modo de ser en el curso de los 27 años transcurridos junto a un hombre público, empresario primero y polí­tico ilustre después, como mi marido. He considerado que mi papel debe circunscribirse principalmente a la esfera privada, con el objetivo de aportar serenidad y equilibrio a mi familia. He afrontado con respeto y discreción las inevitables discusiones y los momentos dolorosos que comporta una larga relación conyugal. Ahora escribo para expresar mi reacción ante las afirmaciones realizadas por mi marido durante la cena de gala que siguió a la entrega de los Telegatti, en la cual, dirigiéndose a algunas de las señoras presentes, se entregó a consideraciones para mí­ inaceptables: '... si no estuviera ya casado, me casarí­a con usted inmediatamente', 'contigo irí­a donde fuera".

"Son afirmaciones", seguí­a la carta, "que considero lesivas para mi dignidad, afirmaciones que por la edad, el papel polí­tico y social y el contexto familiar [dos hijos de un primer matrimonio y tres hijos del segundo] de la persona de la que proceden, no pueden ser consideradas simples comentarios jocosos. A mi marido y al hombre público exijo por tanto excusas públicas, no habiéndolas recibido en privado (...) En la relación con mi marido he elegido no dejar espacio al conflicto conyugal, incluso cuando su comportamiento ha creado las condiciones para el mismo. (...) He tenido siempre en cuenta las consecuencias que mis posibles reacciones habrí­an podido generar en la dimensión extrafamiliar de mi marido y en mis hijos. Esta lí­nea de conducta encuentra un único lí­mite, el de la dignidad de una mujer que debe constituir un ejemplo para sus hijos (...) Ante mis hijas, hoy adultas, el ejemplo de una mujer capaz de defender su dignidad frente a los hombres asume una importancia particular (...); creo que la defensa de mi dignidad ayudará a mi hijo a situar entre sus valores fundamentales el respeto hacia las mujeres, de forma que pueda mantener con ellas relaciones sanas y equilibradas".

A media mañana, los teléfonos móviles echaban humo. Un mensaje circulaba por todo el paí­s: "Veronica es grande". También echaba humo la página de Forza Italia en Internet. Numerosas admiradoras de Berlusconi acusaban a La Repubblica de haber inventado la carta. En los pasillos de la Cámara de Diputados, donde precisamente se discutí­a el proyecto de ley sobre parejas de hecho, no se hablaba de otra cosa. El alcalde de Venecia, Massimo Cacciari, de reconocida amistad con Veronica, comentó que la "bellí­sima carta" no debí­a haberse publicado, pero agregó que resultaba "evidente" que el matrimonio estaba "roto".

El epicentro de la tormenta matrimonial se encontraba precisamente en Forza Italia. Porque la frase de Berlusconi que más molestó a Veronica, la de "me casarí­a con usted de inmediato", fue dirigida a Mara Carfagna, antigua velina (las señoritas que decoran casi todos los programas de la televisión italiana) y actual diputada de Forza Italia. Algunas diputadas del partido se poní­an de parte de la esposa y aprovechaban para quejarse por la abundancia de antiguas veline en el grupo parlamentario. La crisis matrimonial amenazaba con convertirse en crisis polí­tica.

Habí­a que intervenir, y Berlusconi lo hizo. A primera hora de la tarde envió su propia carta a las agencias de prensa: "Querida Veronica, he aquí­ mis excusas. Era reticente en privado, porque soy jocoso pero también orgulloso. Desafiado en público, la tentación de ceder es fuerte. Estamos juntos desde hace una vida. Tenemos tres hijos maravillosos que has preparado para la vida con la atención y el rigor amoroso propios de la espléndida persona que eres. (....) Hemos hecho juntos más cosas de las que estamos dispuestos a reconocer en un periodo de problemas y turbulencias. Esta fase terminará, y terminará dulcemente, como todas las historias auténticas. Mis dí­as son una locura, lo sabes. El trabajo, la polí­tica, los problemas, los desplazamientos, los exámenes públicos que no terminan nunca, una vida bajo presión constante. (...) Todo eso abre espacio a las pequeñas irresponsabilidades de un carácter jocoso, autoirónico y a menudo irreverente. Pero tu dignidad no tiene nada que ver, la custodio como un bien precioso incluso cuando de mi boca salen frases irreflexivas. (...) No, créeme, no he hecho propuestas de matrimonio. Excúsame, te lo ruego, y acepta este testimonio público de un orgullo privado que cede ante tu cólera con un acto de amor. Uno de tantos".

Veronica Lario no quiso comentar la carta de su marido.


Berlusconi y Mara Carfagna- EFE



Berlusconi y Veronica, su esposa
- AP


Didius

Ejem, lo cierto es que es un auténtico montaje, ya que en breve publican la biografí­a de la susodicha. No lo sabí­a hasta que un italiano más avisado que yo me ha advertido.

Rufo

La señora de Berlusconi luce una cara algo recauchutada.. ¿o son ilusiones mí­as?
"Ser tonto, egoísta y tener buena salud, son las tres condiciones requeridas para ser feliz; más si la primera nos falta, todo está perdido"

patillotes

Si, tiene cara rara. Pero esto es el Areopago, asi que nos la cepillariamos.

el de la 13

Cita de: Didius en Febrero 01, 2007, 02:13:37 PM
Ejem, lo cierto es que es un auténtico montaje, ya que en breve publican la biografí­a de la susodicha. No lo sabí­a hasta que un italiano más avisado que yo me ha advertido.

Me temia yo algo de eso. Pero la verdad es que tampoco deja en muy buen lugar a Berlusconi, eso de prestar su vida privada a montajes a lo Aida GH. Y si la mujer lo ha hecho sin permiso, entonces es cierto : "Veronica es grande".

Que bueno, como de costumbre, el articulo del Gonzalez, Enric.
Sus voy a hacer una pubricidad mala.

Ariete

Cita de: Rufo en Febrero 01, 2007, 02:19:13 PM
La señora de Berlusconi luce una cara algo recauchutada.. ¿o son ilusiones mí­as?

Dentro de 20 años parecerá Carmen de Mairena. EL botox y la silicona son pan para hoy y hambre para mañana.

Lacenaire

Silvio Berlusconi es uno de mis polí­ticos-fetiche. Un crack , un huracán de los medios , un titán de la polí­tica...
Cuando apareció ataviado de corsario de discoteca casi me ahogo de la risa. Creí­ que no se podrí­a superar - lo mismo pensé cuando llamó carcelero nazi a un eurodiputado - , hasta que se puso a hacer de vendedor de teletienda en el debate contra Prodi . Lo dicho ; un crack.

Lacenaire

Nada habí­a antes de Silvio ; después de Silvio , nada.

Gatinho

Cita de: Rufo en Febrero 01, 2007, 02:19:13 PM
La señora de Berlusconi luce una cara algo recauchutada.. ¿o son ilusiones mí­as?

Sí­, pero en la casilla 1 de la quiniela o totocalcio de la liga Nip/Tuck, Silvio-Veronica, X.

Hoy, mañana, y siempre... con el Barí§a... en el corazón.