Ser administrador consiste en el areópago en que, con salidas de tono o sin ellas (que las tenga o no es irrelevante para su función, máxime si en la casa se le permiten a todo el mundo), un tío que sabe informática dedica parte de su tiempo, de gratix, al mantenimiento técnico de este chiringuito. El moderador, que es el que lleva el negociado de la mediación entre kindergarten inmates, es única y exclusivamente Dan, y yo creo que las dos figuras están más que claramente diferenciadas en este putiferio.