Pasajes bí­blicos.

Iniciado por Dee Dee, Noviembre 22, 2010, 06:17:47 PM

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Dee Dee

Cita de: Ariete en Noviembre 23, 2010, 01:57:01 PM

Entonces miró a todas partes, y viendo que no parecí­Â­a nadie, mató al egipcio y lo escondió en la arena.


Bien, ¿Qué nos enseña este pasaje? Que cuando matas a alguien hay que hacer desaparecer el cadáver. Es elemental. Y si no tienes un desierto cerca siempre puedes enterrar sus pies en un bloque de cemento y cuando se seque tirarlo al mar. Y si tampoco tenemos mar cerca, entonces se puede usar ácido fluorí­drico y cubos de PVC donde meter los trozos del cuerpo a disolver, ¡¡Nunca uses la bañera para eso!!

Esa es la enseñanza bí­blica del dí­a, corderos de Dios, podéis ir en paz.

Este pasaje que os da tanta risa y que según parece entendéis como un asesinato con alevosí­a y ocultación de cadáver, visto a la luz del  momento histórico en el que acaeció, se entiende como un acto de defensa de su pueblo.  Indignado y en un arrebato (del que no muestra ningún arrepentimiento, por lo que se ve claramente que era usual tomarse la justicia por su mano en la tribu y vengar la sangre derramada del hermano) mata a aquél que hiere a uno de los suyos (es entonces cuando Moises renunció a todo lo que le ofrecí­an los egipcios y tomó partido por su pueblo).  Tampoco Moises era tonto. Enterró el cadáver ya que por la Ley egipcia habí­a asesinado a un oficial y tendrí­a castigo.


El Deuteronomio como bien dice Yehuda es un recordatorio de las Leyes y demás normas que se expusieron en Éxodo, más explí­citas y perfeccionadas.  No olvidemos que ya habrí­a muerto la primera generación de israelitas y convení­a refrescar a la segunda generación las instrucciones dadas para habitar la tierra prometida.

Ariete

CitarEste pasaje que os da tanta risa y que según parece entendéis como un asesinato con alevosí­a y ocultación de cadáver, visto a la luz del  momento histórico en el que acaeció, se entiende como un acto de defensa de su pueblo. (...) ya que por la Ley egipcia habí­a asesinado a un oficial y tendrí­a castigo.

Hay que tener cautela con esa clase de justificaciones, que un etarra también pega un tiro a alguien arguyendo que es en defensa de su pueblo, aunque la ley española (que siente ajena, igual que Moisés la egipcia) vea eso como "asesinato". Yehuda añadirí­a que tal cosa es así­ debido a Sabino Arana, el jesuitismo de los nacionalistas, los várdulos y la hostia.

Por otra parte, tampoco hay la proporción debida entre el daño y el castigo, ya que el desdichado egipcio solamente "golpeaba a uno de los hebreos" y hale, entonces ya hay que matarlo, qué piadoso.

Dan


Dee Dee

Y qué perra con ver sucesos arcanos con los ojos de nuestros tiempos.

Dan


Ariete

Si es una época que no tiene nada que ver con ésta entonces no puede sacarse ninguna lección moral de todas esas historias protagonizadas por aliení­genas y mejor tirar ese libro a la basura. Pero si ocurre como con Chespir, las tragedias griegas o cualquier otra obra literaria de las de poner los ojos en blanco, que hablan de la naturaleza humana y de dilemas universales en los que nos reconozcamos más allá de las costumbres y modas de cada lugar, entonces no queda otra que juzgar a Moisés como lo que era, un terrorista de mierda.

Yehuda

Los egipcios son de la Edad del Bronce Tardí­o (1500-1200 aC)

De esa época datan algunas cosillas como el prepucio de sacerdote egipcio y beduino
-que en la época del Génesis (ca. 515 aC) ya eran una cosa rara-
como el eco del batallón de la infanterí­a imperial egipcia partiendo hacia Bet-Sen

Sanctus, Sanctus, Sanctus, Dominus Deus Sebaoth

En la época de los nazarenos (25-250 dC) rezaban tres padrenuestros,
uno al amanecer, uno al mediodí­a, y uno al atardecer

Yehuda

Yahvé/Dios le dió a su pueblo "como alianza la circuncisión" (Hechos 7, 8]

En la babel de Babilonia el prepucio cortado era una cosa rara y lejana, cosa de "beduinos de cabeza rapada", cosa de "Egipto", y cosa de "Judá, Edom, Amón y Moab" (Jer 9, 24) [más tarde Erezt Yisrael estarí­a formada por un lado por "Israel/Samaria" y por otro lado por "Galilea, Perea, Judea e Idumea (al lado del wadi Araba)"]

Junto a un gran relato que inventaba el pasado de un Templo y un Pueblo,
una colección de rasgos gastronómicos, una lista de tres fiestas y el prepucio cortado como señal de distinción,
los escribas y letrados desarrollaron una intrincada red de normas interminables sobre lo puro y lo impuro,
y una ritualización de la vida cotidiana para su purificación/santificación

Las piscinas estucadas y las vasijas de caliza tallada son fieles testigos mudos
de una agradable afición al agua y a la limpieza, que al mismo tiempo serví­a para subrayar
la necesidad de no contagiarse con lo extraño y mantenerse sin mancha, limpios, puros, separados, destilados

     

Yehuda

mamleket kohaní®m wegí´y qadí´s

"reino de sacerdotes y nación santa"

Yehuda

Alrededor de los años 120-150 dC

Los rabí­nicos dijeron: nuestra religión no tendrá forma polí­tica

Los cristianos dijeron: nuestra religión será la religión de Roma

Y desde la Hélade del Mar Egeo, desde Alejandrí­a hasta Mahó
se escindió la sinagoga farisea del Mediterráneo   

Yehuda

"El sábado (...) No harás trabajo alguno, ni tú, ni tu hijo, ni tu hija,
ni tu esclavo, ni tu esclava, ni tu buey, ni tu asno, ni tu ganado"

"ni el emigrante que viva en tus ciudades"

El judaí­smo se extendí­a como el fuego por un reguero de pólvora
Desde tiempos inmemoriales
Pues un dí­a de descanso a la semana era una idea luminosa

Arrasó definitivamente en tiempos del cabrón del Augusto
con la idea de una caja de resistencia que amparara a "las viudas y los huérfanos"

Las mujeres se convertí­an en masa

Yehuda

Por otro lado la mitad de los varones judí­os tenemos la maní­a de no casarnos con mujeres judí­as

Ariete

¿Eres judí­o Yehuda?, con todo el respeto e interés lo pregunto.

Yehuda

#43
Saulo consideraba que los que "sólo comen verduras" -a raí­z del tremendo Viernes Santo- no caminaban por el "camino (correcto)" (la jalajá) pues según este acalorado rabino de Jerusalem nacido en Tarso -Saulo (que ustedes llaman San Pablo)- que conoció a los nazarenos en "la casa de Marí­a, madre de Marcos", bastaba una sencilla oración para hacer puros todos lo alimentos.

Simón el Piedra y Yaakov ha Sedeq, en cambio,
consideraban que si algo habí­an aprendido es que no habí­a que sacrificar corderos en el Templo.

Saulo, por su parte, decí­a que "el Evangelio de Dios" proclamaba que habí­a que sacrificar la carne,
pues el Cristo habí­a sido crucificado para librarse del "cuerpo del pecado"

Quizá de lo poco sensato que dijo este fanático fue:

-"Que cada uno controle su herramienta/ánfora/galera/pene"

-"huid de la impureza"

Dijo el Apostol con voz tronante en medio de la asamblea/ekklesia

Algo que le hizo famoso entre las que guardaban "silencio en la asamblea"

2000 años después Benedicto XVI sigue meditando sobre la ánfora/galera

Yehuda

"Que cada uno sepa guardar su cuerpo en santidad y honor" (en la venerable traducción de Nacar y Colunga)

"Que cada uno sepa tratar santa y dignamente su propio cuerpo" (en la traducción de las Ediciones Paulinas)