Hilo troll de troleadas trolantes

[Rufo]

Bueno, de acuerdo a rasgos generales. Sólo insistir en que a cierta edad si una hamburguesa del McDonalds te parece que está bastante bien, o una obra expuesta en ARCO te parece una puta mierda, hay que tener los huevos suficientes para reconocerlo.

[Caracartón]

Dos cositas.
En el terreno de las catas (sea vino, aceite queso o agua) muchos expertos, a tí­tulo individual, hacen simplemente descripciones si llegar a hacer valoraciones tipo 91/100. En el caso de vinos, lo normal es que se junten varias personas para crear un comité de cata donde ya si aparecen descripciones y valoraciones. Eso sí­, si un vino tiene defectos se deja bien claro y el que me venga diciendo que le gusta el vino con defectos pues en fin, que le vamos a hacer.

En segundo lugar, en las ferias de alimentación en las que los expositores te ofrecen su producto y salvo que te estén solicitando la opinión sincera y sin tapujos, a todo el mundo le dices que está muy rico y punto, después ya comentarás lo que realmente te ha parecido tal jamón o tal vino.

[Dan]

Yo curré con un enólogo de aquí­, importantillo y tal, y decí­a que mucho más importante que lo que él dijera es lo que a ti te gustara. Un tí­o campechano, honesto, y que si le quitabas la corbata no lo distinguí­as de un hortelano que visitaba la capital para comprar repuestos agrí­colas ni de coña.

[Rufo]

Equilicuá.

Y aplí­quese tal baremo a pintura, literatura, cine, mujeres, etc.

[Lacenaire]

Eso no es un baremo; es una cosa perfectamente normal. Por mucho que diga el crí­tico que este vino te gusta más que aquel y te encañone y te secuestre y amenace con matar a tu familia si no tiene razón no se la darás. O se la darás mintiendo, vale. Pero qué tiene eso que ver con que en el arte y la gastronomí­a no haya puntos de apoyo para establecer unos mí­nimos de objetividad.

[Rufo]

Que sí­, que hay puntos de apoyo, para probar tal o cual cosa, pero que a la hora de la verdad te la refanfinfla porque quién tiene que estar al mando (cosa que muchas veces por snobismo no ocurre) es el gusto personal.

[Lacenaire]

Estoy en completo desacuerdo.

El gusto personal es eso: personal. Nadie te lo puede cambiar, ni te puede obligar a disfrutar más de unas cosas u otras. Pero eso no significa que el tuyo sea bueno, o mejor que otro. Pero tampoco tiene el mismo valor que un criterio cimentado y argumentado en razones, experiencia, conocimiento o lo que quieras. Y yo eso creo que hay que reconocerlo para no acabar comparando Gran Hermano 12 con Dostoyevski.

[Dan]

El simple hecho de que el queso te joda la degustación del vino es como para desconfiar de todo esto.

[Rufo]

Estoy en completo desacuerdo.

El gusto personal es eso: personal. Nadie te lo puede cambiar, ni te puede obligar a disfrutar más de unas cosas u otras. Pero eso no significa que el tuyo sea bueno, o mejor que otro. Pero tampoco tiene el mismo valor que un criterio cimentado y argumentado en razones, experiencia, conocimiento o lo que quieras. Y yo eso creo que hay que reconocerlo para no acabar comparando Gran Hermano 12 con Dostoyevski.

Pero, salvo para orientarte en probar tal o cual cosa, ¿para qué te sirve el criterio personal de un entendido?. Estamos hablando de disfrutar de los placeres de la vida, no de seguir la corriente a una mayorí­a y decir que sí­ con la cabeza despacito cuando has probado un plato supuestamente exquisito por el que te han soplado una cantidad exquisita aunque estés a punto de vomitarlo.

[Lacenaire]

A mí­ me parece que va en contra del gregarismo. Es decir, cualquier cosa en esta vida, del comer o del mirar, se aprecia más o menos dependiendo de la experiencia que tenga uno del tema. Una persona que solo escucha los 40 no apreciará música más allá de los radiohits programados por una panda de ejecutivos cocainómanos. No se nace aprendiendo a escuchar sino que se aprende. Es mejor enseñar a la gente a tener espí­ritu crí­tico y a saber algo del tema y luego ya una vez convenientemente armado decidir por uno mismo por dónde le irá la vena. Lo contrario, la ausencia de crí­tica, es una forma de limitar las entendederas del personal. Total, si a mí­ me gusta Dan Brown es que Dan Brown es la caña. Me parece alimentar la pobreza de espí­ritu. Lo contrario de ilustrar a la peña.

Lo que pasa es que en la crí­tica hay mucho cafre y mucho snob instalado. Además de estar sumergida en el negocio, por lo que pierde su imparcialidad, con lo que te la encuentras loando mojones e ignorando a los buenos. Pero la corrupción y la pérdida de imparcialidad son motivos mayores para educar a la gente y que además de opiniones superficiales puedan apoyar sus gustos en argumentos sólidos. Es la mejor manera de no dejarse engañar, aunque siempre hay cierto grado de incertidumbre en estas cuestiones por su misma naturaleza.

Es importante ser capaz de trascender el gusto inmediato de un juicio más meditado, más profundo, y para eso se necesita a personas que dediquen unos cuantos años a estudiar y entender los productos que nos venden - porque es lo que son- , a meditar y escribir sobre ellos, para que los leamos y seamos consumidores (de cultura, cheetos o lo que sea) más conscientes y mejor informados. La ausencia de teorí­a sobre un tema lo que consigue generalmente es que se consuma de manera indiscriminada y subnormalizante, con su consiguiente efecto embrutecedor.

[Lacenaire]

Y aún dirí­a más, Dupont, una vez hablamos sobre si el cine debí­a ser considerado un entretenimiento popular o un arte y tú decí­as que principalmente lo segundo. Deduzco que te mola el cine y lo compras con cierto ojo crí­tico. Estoy seguro de que aquí­ sí­ crees que hay pelí­culas mejores o peores con independencia de que a un fulano le guste más Transformes 2 sí­ o sí­, ua, ua, tú y yo lo sabí­amos.

[Rufo]

Por partes: Yo creo que el gregarismo se combate con la educación y desde pequeñitos, (como dices más adelante) no de mayores y siguiendo a pies juntillas a presuntos gurús de los que desconoces su formación. Con un poquito de apertura de miras en lo que a educación se refiere, con medios adecuados a la edad se proporciona al niño el abanico de posibilidades por las que pueden optar y las herramientas necesarias para decidir lo que les gusta (música, pintura, cine, gastronomí­a...)

En cuanto a lo que me dices del cine que me gusta no le hago ascos a una pelí­cula de acción si está bien hecha. Recuerdo que cuando estrenaron Terminator 2 o Parque Jurásico independientemente del argumento, o del objetivo del directo me parecieron pelí­culas que merecí­an la pena sólo por los novedosos efectos especiales que empleaban.

Tengo la sensación de que estamos diciendo cosas muy parecidas; mi postura es simplemente que, visto lo visto, dudo del criterio de los presuntos expertos (y a las pruebas del Guggenheim y del McDonalds me remito) y como me veo incapaz de distinguir al crí­tico bueno del crí­tico malo, me fí­o de mi gusto; eso sí­, sin pontificar, leyendo y escuchando sobre esos temas, abriéndome a sugerencias y con posturas flexibles, no como el que saca la navaja cuando alguien le niega que el vino de su pueblo es el mejor del mundo; sin embargo, mi paladar personal es el que manda.

[Lacenaire]

siguiendo a pies juntillas a presuntos gurús de los que desconoces su formación.

Pero es que eso no es lo que digo. No hablo de zombificar. Hablo de educar. Y para eso hace falta gente que se forme en. ¿De dónde salen los materiales y criterios para educar a la gente si no es de expertos reconocidos? Tampoco son infalibles, claro, y que los haya crédulos, interesados, sobornados o fanáticos de la moda no significa que el oficio no tenga razón de ser.

Es que es evidente que para poder generar conocimiento en un campo tienes que acreditar a una serie de personas en él, para que se dediquen a estudiarlo, analizarlo y emitir sus ideas en forma de libros, papers y pajotes mentales diversos. Yo no hablo de presuntos expertos. Hablo de expertos a secas. Cuya existencia no me parece posible ni legí­timo negar. Porque existen. Aunque algunos sean gilipollas.

[yonnon]

siguiendo a pies juntillas a presuntos gurús de los que desconoces su formación.

Pero es que eso no es lo que digo. No hablo de zombificar. Hablo de educar. Y para eso hace falta gente que se forme en. ¿De dónde salen los materiales y criterios para educar a la gente si no es de expertos reconocidos? Tampoco son infalibles, claro, y que los haya crédulos, interesados, sobornados o fanáticos de la moda no significa que el oficio no tenga razón de ser.

Es que es evidente que para poder generar conocimiento en un campo tienes que acreditar a una serie de personas en él, para que se dediquen a estudiarlo, analizarlo y emitir sus ideas en forma de libros, papers y pajotes mentales diversos. Yo no hablo de presuntos expertos. Hablo de expertos a secas. Cuya existencia no me parece posible ni legí­timo negar. Porque existen. Aunque algunos sean gilipollas.

Estamos en Yakarta, donde un grupo de estudiantes extranjeros se despide de su profesor de filosofí­a, que los somete a un último y perverso test. En pleno Apocalipsis nuclear, solo diez de los veinte alumnos pueden acceder al búnker: ¿qué harán para salvar el pellejo?

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[Lacenaire]

De filosofí­a. Letras. Matadlos a todos ------------sote de siensia------