Tyson, como buen boexeador profesional, ha recibido muchos golpes en la cabeza, pero no los suficientes como para meterse en una charca infestada de pirañas con una caña de pescar como único arma. Se me olvidó apuntar que el debut de Tyson en Pride no lo hará bajo reglas MMA;
el combate será (en el mejor de los casos) una superfight de boxeo.
Y digo en el mejor de los casos porque en un primer momento la idea de los japos era la de involucrarlo en unas pocas exhibiciones de boxeo.
He de rectificarte Tejemaneje. Si Tysn está fichado por Pride es precisamente porque Mike no tiene ni para comprar tabaco. Su ruina es total, hasta el punto de que hace escasos meses llegó a aceptar una oferta consistente en dar clases de boxeo en un hotel de lujo para directivos ricos y ociosos por un puñado de miles de dólares. Y hablamos de un tío que ha ganado cerca de 350 millones de euros a lo largo de su carrera.
La apuesta de PrideFC es clara. Pretende irrrumpir en el mercado americano y para ello nada mejor que contar con un reclamo como Tyson. La idea inicial de utilizarlo sólo en insípidas exhibiciones pierde fuerza en favor de la posibilidad de involuclarlo en superfights de boxeo contra strikers de élite de PrideFC. El primero en ofrecerse, ya fuera bajo reglas MMA, kick-boxing, muaythai o boxeo fue Crocop, pero éste tiene otro gran combate antes que es el del título ante Fedor (que habrá de ser pospuesto, Crocop tiene el pie lesionado). El otro gran striker de PrideFC es Hunt.
Al hilo de todo esto toma sentido el hecho de que el combate entre el propio Hunt y Butterbean sea también bajo reglas de boxeo, algo que de no relacionarlo con Tyson no tendría ningún sentido. Cierto es que Butterbean fue boxeador y Hunt kick.boxer, pero ambos llevan dos años compitiendo regularmente en MMA.
Tyson, salvo recuperación súbita y milagrosa, ya no es competitivo ni siquiera en el mundo del boxeo. PrideFC tan solo lo quiere como atracción de feria que atraiga sponsors, cadenas de televisión y público. Respecto a las posibilidades de Tyson en las MMA, quizás el de finales de los 80 sí que hubiese sido una bestia dificil de parar a poco que asimilase los conceptos grappling y wrestling que relata Ghostdog. Es cierto que por su estatura carece de jab y de distancia, pero la explosividad que exhibía entonces hacen creer que podría haber sido un tipo dificil de derribar. Y en las MMA un boxeador con la pegada que tenía Tyson y con guantilllas de MMA hubiese sido un elemento muy peligroso para la integridad de cualquier cráneo.
Seguramente, por hacernos una idea, los luchadores MMA que mayor semejanza podrían admitir con un hipotético Tyson veinteañero y nociones de grappling, serían el primer Vovchanchin (174cm) o el mismo Hunt (178cm). Ninguno de estos utiliza/ba practicamente rodillas o patadas;
apenas alguna low-kick. Tyson además era mucho más rápido y evidentemente tenía una pegada muy spuerior a ambos. Ese Tyson sin guantes de boxeo que amortiguasen sus golpes hubiese sido un espectáculo;
habría perdido combates por sumisión, seguro, pero habría dejado muchas mandíbulas colgando por el camino. Melvin Manhoef, salvando las distancias, me recuerda algo a un primer Tyson en miniatura. Pierde combates pero verlo pelear merece la pena
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Butterbean es como Sapp, cada vez que se sube a un ring y el combate sobrepasa los dos/tres minutos, la posibilidad de que muera por infarto en cualquier momento va tomando cuerpo. En la anterior velada de PrideFC fue ridículamente sometido por Minowa, de apenas 83 kilos, y en su debut fue sometido por idéntico procedimiento por el escritor-luchador-izquierdoso-showman Genki Sudo, de apenas setentaypico kilos. Si el combate fuese con reglas de kick.boxing o muaythai, Hunt podría fundirlo a low-kicks, pero siendo de boxeo la cosa está mu mala para el samoano.
Los japos son muy caprichosos planificando combates, incluso rayando en la ruindad. Firmaron a la leyenda del judo Pawel Nastula, ya con 36 tacos. En lugar de darle paquetillos japoneses para que fuese fogueandose antes de comenzar con los grandes nombres, le dieron como debut a Minotauro, como siguiente rival a Alexander Emelianenko, como tercero a Edson Drago y ahora, como cuarto combate le echan a Barnett. Estrategia encaminada a ensuciar su prestigio. Y es que los judokas no japoneses exitosos son como una afrenta para el público nipón. Algo similar hicieron con Rampage Jackson cuando éste amenazba con perturbar el reinado del gran protegido de PrideFC por antonomasia, Wandelei Silva. El americano llegó a decir en una entrevista "esos malditos japoneses están intentando matarme, pero mientras lo intentan yo me quedo con su dinero"