Pues cágate, lorito, ¡era valenciano! Lo he arreglado, no sin estropiciar el saludo de bienvenida, que durante unos angustiosos minutos ha sido:
Piiiiip.
- ... le habrá dado este cabrón.
- ¡Dani! ¡El saludo!
- Le den por culo, qué mierda es una cojineta, será almohadilla, digo yo.
- Pero no dig
Piiip.